LAS BAJAS Y LOS MALOS MODOS DEL REGIDOR ALIMENTAN EL MALESTAR DE LOS TRABAJADORES MUNICIPALES
El Comité de Empresa de trabajadores municipales presentó dos documentos
dirigidos a alcaldía, uno de queja por el proceder el regidor y otro en el que
denunciaba la saturación de trabajo generada por bajas de larga duración, y que no
se estaban cubriendo.
Así, aconteciera en el pleno del pasado mes de abril cuando la portavoz de
Meaño Independiente, Cristina Castro, interpelaba al regidor Carlos Viéitez en
base a un escrito de queja presentado por registro por parte del Comité de
Empresa de trabajadores municipales, y en el que se lamentaban los malos modos
recibidos varios trabajadores por parte de la alcaldía. Por tal motivo, en la sesión plenaria se le preguntaba al regidor si, transcurrido el tiempo, había mantenido
encuentro alguno con los trabajadores afectados para allanar la situación generada.
No obstante, el alcalde evitó pronunciarse sobre la cuestión -que le había sido
formulada con anticipación por escrito para poder ser abordada en la sesión-,
con un escueto “no voy a entrar en ello” (puede verse pinchando en el siguiente enlace, en el apartado final de "Ruegos y preguntas": videoacta del pleno del 10 de abril de 2014 (web municipal)
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Los cinco ediles de la oposición en un pleno |
El referido escrito, formalizado por registro hace uno tiempo y que
estaba rubricado por los seis integrantes del Comité de Empresa, salió ahora a luz, siendo leído en
ese pleno por la portavoz de M.I. Cristina Castro. En él se manifestaba,
literalmente, que varios trabajadores afectados venían “recibiendo presiones, gritos e incluso golpes en la
mesa” por parte del regidor, instándole a éste a “reconsiderar su trato cara a
los trabajadores del concello, manteniendo el respeto y guardando las formas en
todo momento, y sin ejercer presiones a la hora de tratar de resolver o
tramitar un asunto”.
Bajo mínimos
Las bajas, que mismo denuncia también estos días también la Comisión de
Empresa, están lastrando al área social. Dos focos se hacen especialmente
sensibles. De una parte, la situación en Escuela Infantil Municipal 0-3 años
-que se manifestara ya a inicios de curso con un cierre temporal- y que desde
finales de octubre vino paliando la situación durante seis meses con una
trabajadora menos -de las seis titulares del centro-, mismo quedándose, por
momentos, con dos menos, con la consiguiente carga adicional para
el resto del personal. Hace unos días se incorporó una técnico en educación
infantil, pero el servicio continúa lastrado a la hora del refuerzo preciso en
comedor.
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Centro Rural Polivalente de Meaño |
Otro de los focos sensibles es el Centro Rural Polivalente de Meaño que
atiende a la tercera edad, y que también motivara un cierre en Semana Santa y
días posteriores, por la baja laboral de las dos cuidadoras titulares, que atendían este servicio, y que
contaban con el refuerzo de la conductora del transporte asistencial. La
situación se palió en la reapertura, tirando para ello de personal de otro
servicio, alguno no cualificado para tal fin. Hace unos días se procedió a la
contratación de una cuidadora, contando con el apoyo de la persona del transporte
asistencial. Pero aún así se mantuvo sin cubrir durante dos meses la otra
baja, hasta que esta se reincorporó estos días.
A estas bajas se añaden tres trabajadoras a media jornada que seguían sin
cubrirse en el servicio de limpieza, más la plaza de Educadora Familiar, por
baja de la titular, que tampoco se sustituye desde hace un año (la baja se
mantiene desde mayo de 2023). Y desde hace unas semanas, se añade la baja la
Trabajadora Social. Así las cosas, la labor de estas dos profesionales lo está
asumiendo a mayores la otra titular -y única- del servicio.
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Operarios municipales trabajando a pie de calle |
Los riesgos
Desde el Comité de Empresa se advierte del riesgo de que, al no cubrirse
las bajas, “la sobrecarga de trabajo puede ocasionar más bajas de personal”,
amén a lastrar los propios servicios. El gobierno local ha reaccionado estos
días con la creación de bolsas para cubrir las vacantes esperando que la situación
se reconduzca. Pero para actuar en este sentido, en casos, se ha tardado un año. Cabe tener en cuenta que el área
social se trabaja con personas, no con documentos en papel, o informático. Y
eso, humanamente, debería cambiar las prioridades, los papeles “aguantan nevera”
en oficina, pero las personas lo que precisan es una atención digna y a tiempo, en el día a día.
Pon ende, en todo estos largos plazso, ni una llamada del jefe de personal -esto
es, el regidor Carlos Viéitez- a sus trabajadores en baja de
larga duración y por situaciones muy graves -pero que muy graves- de salud, y
con las que no ha mostrado la alcaldía -ni el gobierno local por extensión- la más
mínima empatía humana. Modos de actuar y maneras de ser. Este es el modelo de gestión?
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