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Carlos Carrión Álvarez
Carlos Carrión Álvarez
Presidente de Bodegas Paco&Lola
La bodega meañesa Paco&Lola es, con sus 420 socios, la cooperativa
vitivinícola más grande de la Denominación de Orixe Rías Baixas, y la última en
surgir por cuanto lo hace en 2005, si bien las instalaciones propias de la
bodega en su ubicación actual no abren hasta 2007. La firma agrupa 220
hectáreas de viñedo y envasa 2 millones de botellas de Rías Baixas en una
apuesta decidida por el mercado internacional. Su presidente Carlos Carrión
Álvarez, un profesor de instituto natural de Castrelo, que asumió esta
responsabilidad en su día con tan sólo 37 años, acaba de ser reelegido, con 45
años, por tercera vez, y sigue siendo el presidente más joven de las tres
grandes cooperativas.
“NO DEBERIAMOS SUBESTIMAR LAS CALIDADES QUE PUEDAN
CONSEGUIR ALBARIÑOS DE OTRAS ZONAS”
el presidente de Paco& Lola, Carlos Carrión |
Todo
parece indicar que sí porque 2016 ha sido un buen año y prevemos que 2017 lo
sea también. A nivel de la denominación
de origen se ha vendido en torno a 2,5-3 millones de litros más que en 2015, y
entendemos que se está invirtiendo la dinámica negativa que veníamos
arrastrando desde 2009-10. Además que en 2016 no se hayan generado excedentes
para comercializar entre las propias bodegas es también una buena señal.
¿Qué mercados tiran de esta
recuperación?
Sobre todo el internacional,
porque las exportaciones a nivel mundial han crecido un 25 por ciento en este
último año. Están tirando mucho, países como Estados Unidos, Reino Unido,
Alemania u Holanda, pero porcentualmente cabe destacar el mercado asiático que
ha crecido un 65 por ciento, con incrementos sustanciales en países como Japón,
China o Singapur.
¿Y el nacional?
El
mercado nacional a nivel del vino en general sigue a la baja, pero en cuanto a
Rías Baixas 2016 ha sido un año de repunte. En el caso de nuestra bodega
notamos como siguen tirando mercados como Madrid, Cataluña, la Comunidad
Valenciana… pero sobre todo a nivel de ventas notamos un incremento sustancial
en Andalucía, un mercado en el que estábamos menos.
¿Y perciben que este crecimiento es firme?
Todo
hace indicar que sí y que 2017 debería ser el año de la consolidación.
¿Ese crecimiento se notará también en el precio de la uva que cobra el viticultor,
sobre todo en firma como ustedes que se organizan a modo de cooperativa?
Debería
notarse primero en el propio precio del vino y, en consecuencia, también de la
uva. Las estimaciones son que los precios dejarán esa tendencia a la baja que
caracterizó estos años de crisis y repuntarán. Prevemos que las marcas con
precios más bajos van a ir desapareciendo o tendiendo e precios medios y eso,
en buena lógica, va a traducirse en un mejor precio para la uva.
CarlosCarrión en el exterior de la bodega Foto: Iñaki Abella |
Sí,
es cierto que han desaparecido algunas pequeñas bodegas y que las grandes
estamos creciendo en producción. Nosotros mismos están procesando ya toda la
uva que producimos y ya no generamos excedentes, es más, en un plazo corto de
años, tal y como estamos creciendo en el mercado internacional, vamos a
necesitar más uva.
El albariño ha dejado de ser de las Rías
Baixas gallegas, y se planta y se elabora ya en los últimos años en Cataluña, en
Alicante, incluso en California… Me dirá que no son Rías Baixas, pero ¿ese
albariño, con sus matices, podrá convertirse en seria competencia para los
nuestros?
Es
cierto que no son Rías Baixas, aquí el terreno y el Atlántico le otorgan a la
uva una acidez y unos matices que el albariño de otras zonas nunca podrá tener.
Ahora bien, no deberíamos subestimar las calidades que puedan conseguir en esas
zonas, es cierto que tenemos que apostar por lo nuestro, pero sin caer en la
complacencia. Primero, porque en los mercados internacionales la gente de a pie
casi siempre pide por la variedad de la uva, y muchas veces no se fijan ni
donde se produce. Y segundo, porque cuentan con unos costes de producción muy
inferiores a los nuestros. Mismo hay vinos californianos elaborados con uva
cabernet que superan ya de largo en calidad a los originales franceses, y eso
es algo que nosotros no deberíamos perder la vista.
Interior de Paco&Lola |
La
pregunta tiene su fundamento pero no tiene toda la información. Primero, no
todas las fincas de una bodega grande como la nuestra están a la misma altura,
y eso repercute ya en la uva. Luego, cuando se vendimia, se clasifica la uva
por grado alcohólico para elaborar unos vinos u otros. Pero hay más: en el
prensado se hace otra separación, una calidad con la uva que rompe por su
propio peso, y otra que se consigue cuando entra la bomba neumática, y la
fermentación de una y otra son también luego diferentes; o en el proceso
posterior en bodega puedes obtener vinos frescos u otros criados sobre lías.
Incluso si se le para la fermentación a unos vinos y no a otros se obtienen
también matices... Todo ello repercute
en sabores, olores…Es un mundo mucho más tecnificado de lo que pueda parecer en
un principio, y fruto de ello una misma bodega puede obtener vinos muy
diferentes.
¿Y esa variedad de Rías Baixas
(espumosos, ecológicos, de baja graduación) responde a una moda o, en realidad,
el mercado lo está exigiendo?
Sí,
responde a necesidades, y en, ocasiones, responde también a pruebas de ensayo y
error para experimentar con nuevos vinos.
Personalmente
comparto la preocupación de Zárate. Las quejas por el abuso de fitosanitarios
es algo que está yendo en aumento. Sabemos que aquí la producción ecológica es
muy difícil por el clima, pero lo que tenemos que ir es cara a un sistema de
producción más sostenible que el que tenemos en esos momentos y que, además de
generar conflicto, está matando, por ejemplo, toda la fauna útil que existe en
el viñedo.
Lo
es en parte, pero aún se puede ir mucho más allá. Nosotros, de hecho, hemos
comenzado un proyecto de tres años con una bodega del País Vasco y otra de
Asturias encaminado a investigar en ese plazo de tiempo sobre la reducción de
los tratamientos fitosanitarios en el viñedo. Tal vez suene idílico, pero
tenemos que caminar hacia eso, en cuestión de diez años esto tiene que dar un
vuelco total, y ese es uno de los caminos por los que debe apostar la D.O.
Venimos de fechas navideñas y los espumosos
de Rías Baixas parecen que están teniendo una acogida excelente en el mercado.
Ustedes en Paco&Lola, de momento van de mano, de un cava catalán. ¿Para
cuándo un espumoso propio?
Los
espumosos exigen una infraestructura y nosotros, entre este año y el próximo,
vamos también a experimentar y a probar en esa línea.
¿Y aventurarse con los tintos Rías
Baixas que, de momento, las grandes bodegas no apuestan?
También
iniciaremos este año un proyecto con ellos, pero de momento es solo eso, un
proyecto, no más.
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